lunes, 30 de junio de 2014

GUERRA FRÍA AL INTERIOR DEL ´PACTO DEL FUSIL´

El control territorial del centro de Medellín se encuentra en disputa. Una nueva guerra se está presentando por el monopolio del sector, la cual arroja como resultado homicidios y desapariciones que ante la opinión ciudadana se presentan como casos aislados sin correlación alguna, hechos violentos que se adjudican a la delincuencia común cuando en realidad hacen parte del crimen organizado que opera en el sector.

Tradicionalmente, y aunque es negado de forma constante por la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá (Meval), el centro de la ciudad ha sido controlado por la estructura conocida como Las Convivir, las cuales son amparadas por la organización criminal “La Oficina del Valle de Aburrá”. Esta versión puede verificarse consultado a cualquier habitante, flotante o no, que tenga un negocio comercial ubicado en el sector, ya que estos están obligados a pagar “vacunas” semanales que oscilan entre los 40 y los 80 mil pesos dependiendo del tipo de negocio, aunque algunas han alcanzado los 200 mil pesos. Anotando además que los grandes negocios o macro empresas pagan vacunas millonarias.

Para generar mayor claridad, debe entenderse que el amparo que ofrece “La Oficina” a “Las Convivir” obedece al trabajo que éstas ejecutan para ellos: ejercen el control territorial y armado de la zona y son quienes cobran la plata de las extorsiones (‘vacunas’). Sin embargo, su función principal es garantizar el trabajo y cuidar las zonas de los jefes del microtráfico en la Comuna 10 La candelaria, que son alias “Don Omar” y alias “Don Pedro”, el primero de estos amparado por la organización madre, “La Oficina del Valle de Aburrá”.

 Los jefes del microtráfico en el centro
 “Don Omar”
Es un ex sargento de la Policía Nacional. Actualmente maneja más o menos el 30 por ciento del microtráfico del centro y también controla cerca de 20 hoteles del sector que son utilizados para el consumo de droga, denominados por algunos habitantes del territorio como “ollas de vicio”, algunas de estas edificaciones también funcionan para el guardado y custodia del producto.
Este jefe del microtráfico se moviliza en un carro blindado y tiene su centro de operaciones en un lugar conocido como “El Parqueadero”, ubicado cerca a la Plaza Minorista y la bomba de gasolina del sector, cuya fachada funciona como tal y también como compra-venta de automotores. Su anillo de seguridad está conformado por ocho personas cuyo jefe de seguridad es alias “Jaime” o “El Flaco”, y de este esquema de seguridad, presuntamente, también harían parte miembros de la Sijin. Todos portan fusiles de alto calibre y cuidan El Parqueadero de día y noche.
Una fuente cercana a “Don Omar” relató que éste personaje presuntamente “controla una parte de la estación de la policía de La Candelaria. Les paga la nómina los viernes, lo hacía en el parqueadero, ya se cuida un poco más y no lo hace tan seguido ahí. Unos policías llegaban uniformados y otros de civil. Les daba 50 mil pesos a los que llegaban como “rasos”, como sin rango, a veces ni los conocía, sólo les pedía que se quitaran el casco, las gafas y les preguntaba si ya les habían informado como era la vuelta, a lo que le respondían que sí y recibían el dinero; pero también llegaban unos carros de la policía, unas patrullas, a estos les daba 300 mil pesos, pero no se acercaban a hablar con el jefe, ‘Don omar’ les mandaba la plata hasta el carro, lo que significaba que eran de mayor rango”.

Alias “Don Omar”, es un hombre que todo lo resuelve a muerte, asegura la fuente, y relata que incluso llegó a asesinar a su jefe de sicarios, alias “El Bisco”, porque le robó un arma para venderla en el mercado negro. “Don Omar” lo vio por las cámaras de seguridad y al día siguiente le pidió el arma bajo la excusa de cambiársela por otra mejor, una vez desarmado lo mató.
También controla dos “casa del terror” cercanas a “El Parqueadero”, en donde torturan y desmiembran a los que consideran enemigos o a quienes tienen orden de desaparecer. Las usa y controla desde hace cinco o seis años aproximadamente. Uno de los casos fue la pareja que se encontró desmembrada y en bolsas detrás de la Plaza Minorista, cerca de la autopista del río Medellín. “Eran tres personas, dos hombre y una mujer. Habían pasado como tres veces por el frente de El Parqueadero, entonces le avisaron al viejo y éste salió a mirar. Pidió que se los trajeran. Gente de la Sijin los detuvieron, les hicieron una requisa y a la mujer le encontraron un ‘38’ en el bolso. Ellos mismos (presuntos miembros de la Sijin) metieron a esa gente al parqueadero y se la entregaron a ‘Don Omar’, lo que pasa es que la mujer del viejo había tenido problemas con gente del cartel de Cali. Uno de ellos se voló, a los otros esa noche los movieron a una casa del terror de donde salieron picados; un carretillero los traslado en bolsas y los llevó detrás de la minorista, a la autopista del río y ahí los dejaron, al otro día se encontraron los cuerpos”, relató una fuente allegada al delincuente.



DE CÓMO NOS ESTÁN MAPEANDO Y DESPOJANDO PARA "LA PAZ"...

Las Expediciones Bowman coordinan al Pentágono, las universidades y organizaciones y líderes de procesos indígenas y populares. Donde quiera que se implementan hay guerra para la paz del modelo, sea México, Centro América o Colombia urbana y rural. Pasan mayormente desapercibidas. Sus ideólogos no son suficientemente estudiados ni controvertidos. Sus contrapartes gozan de recursos y prestigio. Los efectos en despojo y sometimiento son, ni más ni menos, la conquista hoy, en su modelo post-neoliberal, extractivista legitimado. Hay que hacerle Minga a esta amenaza real para conocerla y detenerla. Así No!!

Geoestrategia y La pax de la propiedad privada
Hernando de Soto, el economista peruano, Presidente y creador del "Instituto Libertad y Democracia" es seguramente uno de los ideólogos orgánicos y estrategas del proceso de conquista transnacional corporativo en curso. Uno de los objetivos estratégicos que promueve con éxito es el de incorporar territorios, líderes y organizaciones indígenas a los mercados especulativos y al modelo extractivista y financiero. Extrañamente, pasa bajo el radar uno de los admiradores y seguidores mas fervientes de de Soto, Geoffrey Demarest, vinculado al Defense Intelligence Agency del Ejército de los EEUU y a las Expediciones BowmanEl argumento esencial de Demarest consiste en que no hay paz sin propiedad privada, lo que requiere mapear e incorporar todos los territorios al régimen capitalista de propiedad privada, es decir, justificar y legitimar la conquista de territorios y pueblos para el capital neoliberal y post neoliberal. 

No sorprende que, Demarest y el Departamento de Defensa de los EEUU, hayan puesto énfasis en Colombia y en la paz del modelo que consiste en esencia en incorporar por la fuerza o por la vía de acuerdos los territorios al modelo corporativo transnacional de propiedad privada. Se trata, como en toda conquista, de ocupar, despojar y simultáneamente legitimar ideológica, jurídica e institucionalmente estas conquistas. Colombia ha sido objeto de análisis y publicación por parte de Demarest, así como de Expediciones Bowman que articulan al Departamento de Defensa de los EEUU, en particular la Oficina de Estudios  Militares para el Extranjero (FMSO por sus siglas en inglés), con la Sociedad Geográfica Americana (AGS por sus siglas en inglés) y a la Universidad de Kansas. Por lo menos dos expediciones se han realizado en Colombia. Una en la Comuna 13 en Medellín, en torno de la Operación Orión, a partir de una ocupación militar sangrienta de este ámbito urbano para incorporarla en la lógica de Demarest al régimen de propiedad y “paz” y la otra, cuyo contenido detallado se desconoce, inicialmente sobre 24 de los 42 municipios del Departamento del Cauca (es posible que el mapeo de los 42 municipios ya se haya completado). Las contrapartes conocidas en Colombia para estas expediciones son GEOSCIRE y CERAC

En la medida en que avanzan las negociaciones en La Habana entre las FARC y el Gobierno Colombiano, a la vez que el proceso exploratorio con el ELN, resulta particularmente relevante conocer la posición y actividades de Hernando de Soto, Geoffrey Demarest, las Expediciones Bowman en Colombia y su relación con el sentido, contenido y acuerdos de paz. Estas iniciativas, ideologías y proyectos exponen las ideas, justificaciones e intenciones de la paz en Colombia desde el Pentágono, al servicio de intereses corporativos del capital transnacional. Es importante además señalar que las expediciones Bowman han enfatizado territorios y pueblos indígenas donde quiera que se han llevado a cabo subrayando su carácter geoestratégico y militar al servicio del Capital. 

Es particularmente importante conocer el contenido y las contrapartes de la Expedición Bowman en el Cauca. Su relación con comunidades y organizaciones indígenas en la medida en que de una parte es cada vez más notoria la presencia de la USAID en esta región en proyectos que incluyen a las organizaciones indígenas y que estos proyectos incorporan mapeo y recolección de información geoestratégica y territorial del tipo que recaban las Expediciones Bowman. Paz, propiedad privada, acceso a información territorial, incorporación al modelo y organizaciones indígenas como agenda militar vinculada a la incorporación de territorios y organizaciones a mercados transnacionales bajo la lógica de ideólogos como Hernando de Soto y Geoffrey Demarest en el contexto de negociaciones de paz cuya condición esencial es que “el modelo no se negocia” no deberían pasar desapercibidas. A continuación tres textos que exponen las Expediciones Bowman para México y Honduras, además que hablan por sí mismos. Agradecemos a Gilberto López y Rivas por sus aportes e interés en este tema, a la vez que esperamos convocar una Minga de aportes para conocer, entender y resistir este instrumento esencial de conquista en curso que no ha generado la atención que merece.

Junio 22 de 2014


domingo, 29 de junio de 2014

Colombia Es El Típico Ejemplo En América Latina De Acumulación Por Desposesión: David Harvey.

Colombia Es El Típico Ejemplo En América Latina, si bien la reacción de los gobiernos de la mayoría de países de América Latina ha sido mucho más sensible a la crisis mundial del capitalismo que lo que se observa en los Estados Unidos y Europa, la excepción es Colombia, cuyo territorio ha sido entregado al capital transnacional para su explotación y depredación. El planteamiento es del reputado sociólogo urbano, geógrafo e historiador social inglés David Harvey, uno de los más connotados intelectuales de la izquierda de prestigio mundial, en desarrollo de una de sus recientes conferencias en la ciudad de Buenos Aires.

En Suramérica, Colombia es un caso patético de las consecuencias nefastas del modelo neoliberal, explicó. “La historia de Colombia es terrible porque es un claro ejemplo de acumulación por desposesión”, agregó Harvey, pues los gobiernos de este país andino han entregado el territorio a las transnacionales minero-energéticas para su explotación, las cuales a su vez son protegidas por el ejército y cuentan con todas las garantías y gabelas del Estado colombiano.

Harvey desarrolla el presupuesto de acumulación por desposesión para analizar fenómenos como los que se dan en Colombia de mercantilización y privatización de la tierra, expulsión violenta de campesinos y la transformación de los derechos comunes en derechos privados.
“Lo que posibilita la acumulación por desposesión es la liberación de un conjunto de activos, incluida la fuerza de trabajo a un coste muy bajo y en algunos casos nulo”, explica el científico social inglés.

Agotamiento del capitalismo
Harvey fue categórico en su análisis al sostener que el sistema capitalista se agotó porque no está funcionando para el bienestar de la gente, por ello, dijo, es urgente pensar en una transición de largo plazo a partir del cambio de patrones culturales, relaciones con la naturaleza y redefiniendo las formas tecnológicas y organizativas de producción, intercambio y consumo.
Su visión crítica de la crisis capitalista da luces respecto del límite al que ha llegado el mundo por culpa de un sistema codicioso, criminal y depredador que no tiene límites.
Este teórico marxista nacido en Kent, Inglaterra, en 1935, doctorado en la Universidad de Cambridge en geografía histórica y con un post doctorado en la Universidad de Uppsala, Suecia, actualmente profesor de la Universidad de Nueva York y catedrático visitante de London School of Economics, es conocido además por sus formulaciones en torno al Derecho a la Ciudad y a la Acumulación por desposesión.

Especulación a expensas del Estado
¿Cómo detener la acumulación de la riqueza mundial?, es la pregunta que hay que hacer, sostiene Harvey, puesto que es irónico que en medio de la crisis civilizatoria que ha causado el capitalismo, haya hoy más millonarios en el mundo que hace tres años, y a los bancos, los grandes especuladores, ahora les vaya muy bien a expensas del Estado. Es decir, “se avala a los bancos y se le pega a la gente”.
Lo peor, pronostica, es que “vamos a ver al Fondo Monetario Internacional hacer más de lo mismo en el futuro: implementando feroces medidas de austeridad que están llevando a una enorme disminución de los niveles de vida de los ciudadanos”.

La irracionalidad capitalista
El sistema capitalista está basado en el crecimiento. En general, la tasa mínima de crecimiento aceptable para una economía capitalista saludable es del tres por ciento. El problema es que se está poniendo cada vez más difícil sostener esa tasa sin recurrir a la creación de variados tipos de capital ficticio, como viene ocurriendo con los mercados de acciones y con los negocios financieros en las últimas dos décadas. Para mantener esa tasa media de crecimiento, afirma Harvey, será preciso producir más capital ficticio, lo que provocará nuevas burbujas y nuevos estallidos de las mismas.
En Estados Unidos se quiere hacer pagar el costo de la crisis económica a los sectores más vulnerables de la población mediante la reducción de programas sociales y la disminución de los impuestos a los sectores más adinerados como ocurrió en los gobiernos conservadores de Reagan y W. Bush. El propósito de estas medidas de claro tinte neoliberal es lograr el rescate de las instituciones financieras, las causantes de la crisis, lo que también se busca hacer en Europa.



Cumaribo en llamas: relato de un atropello bendecido

Los hechos
El día 25 de junio a las 7:30 AM el Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía Nacional (ESMAD) desalojó violentamente a 215 familias indígenas de un terreno denominado "Brisas", en el Municipio de Cumaribo (Vichada). Este terreno había sido ocupado pacíficamente un mes atrás por indígenas pertenecientes a varios pueblos indígenas (sikuani, piapoco, saliva...). Versiones de líderes indígenas hablan de varios heridos, entre ellos dos niños. La guardia indígena actuó con prudencia y no opuso mayor resistencia para evitar daños y perjuicios mayores.

La problemática
Cumaribo (Kumalibo en lengua jiwi) ha sido un territorio ancestral del pueblo sikuani (jiwi). Toda laproblemática de este pueblo, como la de la mayoríade los indígenas de la Orinoquia Colombiana, ha girado desde hace varias décadas alrededor de sus territorios, que vienen siendo afectados de forma creciente por un conjunto de intereses económicos de diversa índole: ganaderos, minero-energéticos, madereros y cultivos de plantación (incluida la coca). Estos intereses en nada han contribuido al ascenso de estos pueblos hacia una vida mejor, sobre todo nada aportan para superar largos períodos de violencia, explotación y exclusión, que los han colocado en vías de extinción física y cultural, pues una rápida mirada sobre la situación de estos pueblos indígenas semi-nómades que tradicionalmente han vivido de la oferta ambiental de sus territorios, nos muestra las graves condiciones de inseguridad alimentaria y las limitaciones que tienen para superar la exclusión política, económica y social que les impide ocupar un lugar propio y digno en la región.

A estos pueblos no sólo se les ha perturbado su entorno con la ocupación que han hecho de sus territorios todos los actores económicos (legales o ilegales, civiles o armados, religiosos o laicos), también han sido lastimados por lasactividades proselitistas de las iglesias, de los partidos políticos y de actores armados, actividades que se realizan bajo la mirada displicente del Estado.
En síntesis, se trata de una violencia social y estructural que ha comprometido su futuro como pueblos. Unasituación que la Corte Constitucional de Colombia calificó como "un estado de cosas inconstitucional."

Buscando la tierra prometida y almas para evangelizar
En 1960 se asentó en 'Cumaribo' el Batallón Colombia, en terrenos que según el líder Juan Mendoza pertenecían al pueblo sikuani (allí estarían enterrados sus abuelos). Este batallón, dirigido por el teniente coronel Álvaro Valencia Tovar, tenía la tarea de neutralizar acciones armadas en la región, entre ellas las de Flavio Barney, reservista del ejército y comerciante de chiqui-chiqui, que se había levantado en armas para imponer su ley en la región. Según el relato de Hernando Sánchez (autoridad tradicional sikuani), "este bandolero" se había asentado en 'Puerto Mosco', sobre el río Vichada y se había apoderado de grandes extensiones de territorio sikuani.



martes, 24 de junio de 2014

Brasil y la memoria negada

Bajo muchos aspectos, las relaciones de Brasil con su memoria son apenas formales y distantes. Ciertos aspectos de la historia reciente del país son tratados como materia que los buenos modales recomiendan no tocar. Varios factores contribuyen para que así sea.
Mi país vivió una dictadura cívico-militar que duró de 1964 a 1985. Al menos en el periodo entre el golpe y 1982, el terrorismo de Estado fue duramente aplicado en todas sus variantes: secuestros y prisiones ilegales, torturas, vejaciones, violaciones, asesinatos. Miles de brasileños tuvieron sus derechos políticos suspendidos, otros fueron jubilados del servicio público (especialmente en universidades) de la noche a la mañana, muchos miles más tuvieron que exiliarse. En fin, hemos vivido el mismo rosario de violaciones registradas en casi todas nuestras comarcas.
Se dice, en Brasil, que en 1985 recuperamos la democracia, y es cierto. Pero, ¿y la memoria? Ah, eso sí que no. Recuperar la memoria significa revolver ese pasado. Y en ese territorio, mejor no pisar. De todos los países latinoamericanos que volvieron a la democracia luego de periodos de dictaduras militares, Brasil es el que menos avanzó en la recuperación de la memoria, el rescate de la verdad y la aplicación de la justicia. Paraguay, por ejemplo, que padeció la dictadura de Alfredo Stroessner, especialmente corrupta y brutal, a lo largo de largos 45 años, llevó otros 14 hasta instalar su Comisión de la Verdad. Brasil, con una dictadura que duró 21 años, necesitó 28 años para instalar la suya.
En Paraguay, por menores que hayan sido los avances (si comparamos, por ejemplo, a Argentina o Chile) en restaurar la verdad y castigar a los culpables de crímenes de lesa humanidad, hay militares y policías detenidos. En Brasil, ninguno. ¿Por qué? Porque aquí los militares aseguraron su impunidad. En 1979, en pleno ocaso de la dictadura, fue decretada una ley de amnistía. Un Congreso maniatado, con mayoría asegurada por el régimen, votó una ley esdrújula e inmoral. Se dijo en aquella época y se sigue diciendo ahora que esa norma ha sido fruto de negociaciones entre el sector más liberal de la dictadura y los sectores más pragmáticos de la oposición. Pero hoy las condiciones son francamente otras. ¿Por qué persistir en la infamia?
En su periodo presidencial, Fernando Henrique Cardoso, sociólogo de prestigio, catedrático punido por el régimen, perseguido y exiliado, decretó leyes que reconocieron la responsabilidad del Estado por violaciones a derechos humanos. Pidió perdón a las víctimas y abrió procesos que resultaron en indemnizaciones y restauración de derechos políticos y civiles. Lula da Silva, sindicalista que se opuso al régimen, perseguido y detenido por poco más de un mes, quiso instaurar, por decreto, una comisión de la verdad que tendría por misión investigar los crímenes cometidos por agentes del Estado durante la dictadura. Enfrentó la durísima oposición de las fuerzas armadas, que contaron con la complicidad de los sectores civiles que respaldaron el régimen militar. Volvió atrás, aceptó negociar el texto del decreto en el Congreso, que lo modificó sustancialmente antes de aprobarlo. Dilma Rousseff, ex militante que padeció dos años de cárcel con derecho a todas las violencias propias del régimen de los generales y sus apoyadores civiles, finalmente instaló la comisión, la cual tiene hasta diciembre para entregar su informe final con todas las denuncias pertinentes.
Nadie será castigado. Ninguno de los responsables por los crímenes de lesa humanidad –ni siquiera los que, frente a la comisión, relataron en detalle las barbaridades que cometieron– será llevado a los tribunales.
Las fuerzas armadas siguen en su silencio abyecto, cobarde. Esta semana, entre uno y otro partido del mundial, las tres armas entregaron a la comisión de la verdad sus respectivos informes oficiales, respondiendo a las preguntas sobre torturas y asesinatos cometidos en al menos siete centros operativos bajo su tutela en la dictadura.
La respuesta no podría ser más cínica: dijeron que no había registro alguno de que en las instalaciones militares hayan sido detectados indicios de desvío de función. Como hay confesiones de torturadores relatando en detalle lo que cometieron, se entiende que, al no haber desvío de función, se preveía formalmente que fuesen utilizadas para la barbarie.

El cinismo cobarde alcanzó su auge en el informe del ejército, asegurando no haber registro de la creación del Departamento de Operaciones de Información, quizá el principal y más cruel centro de torturas. Es decir, si no hay registro de su creación no existió. De nada valen los testimonios de torturados y, más grave aún, de los mismos torturadores. No se sabe cómo Brasil cerrará su participación en la copa de futbol. Pero en la copa de la vergüenza y la cobardía, ya somos campeones.

Atentado contra dirigente de Sinaltrainal en Medellín

El pasado lunes 16 de junio, en horas de la noche, en la ciudad de Medellín sufrió un atentado José Onofre Esquivel Luna, vicepresidente de Sinaltrainal seccional Bugalagrande y trabajador de la multinacional Nestlé S.A. en Colombia. José Onofre goza de medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, a raíz de múltiples amenazas contra su vida.
El atentado a bala se presentó cuando se movilizaba en la camioneta asignada al esquema de protección. El ataque fue repelido por los escoltas del dirigente sindical, resultando muerto un atacante, otro herido y detenido. En el intercambio de disparos demás un conductor de bus quedó herido.
Sinaltrainal realizaba en Medellín un Encuentro Nacional de Responsables Regionales del Equipo Laboral, donde se diccutía como hacerle frente a la violenta política de las empresas que pretenden aniquilar los derechos laborales consignados en la ley y en las convenciones colectivas de trabajo. El evento debió suspenderse por falta de garantías de seguridad.



domingo, 22 de junio de 2014

La guerra es la salud del Estado

En el mundo de hoy, los Estados necesitan la guerra para establecer la dominación sobre otras partes del planeta, para unir a su población contra un enemigo exterior, para impulsar sus propias industrias armamentísticas, que constituyen una parte creciente de sus economías. Cada vez más, grandes empresas e instituciones financieras como el FMI y el Banco Mundial, en conjunción con países como los Estados Unidos, Francia, China, Rusia y otros, imponen su dominio económico por medio de la fuerza militar.
Además, el desarrollo de la industria nuclear conduce a una sociedad nuclear de control y centralización, y a una amenaza para la vida humana y el medio ambiente. La nueva tecnología (drones, etc.) se usa para matar cada vez más gente, y para incrementar la vigilancia del Estado, incluyendo el control de las fronteras de la Fortaleza Europa contra los inmigrantes de África.
La búsqueda de minerales por parte de esas industrias saca a la luz las luchas de los diferentes bloques de poder para establecer el control sobre importantes yacimientos de uranio, petróleo u otros minerales. La guerra está íntimamente ligada a la destrucción del medio ambiente, como la deforestación de la selva durante la Guerra de Vietnam o los enormes daños ambientales durante el bombardeo de las refinerías durante la Guerra del Golfo.
La guerra implica el desplazamiento de poblaciones enteras, la emigración forzosa y el establecimiento de grandes campos de refugiados. Desencadena hambrunas con ataques a las cosechas. Las violaciones en masa son utilizadas como arma de terror y como síntoma de la virilidad distorsionada generada por el militarismo.
Así como las amenazas fabricadas del tipo de la del fundamentalismo islámico y, de nuevo, la del Oso Ruso o la de la agresión imperialista occidental, también se emplea cada vez más la amenaza de desorden interno, a menudo provocada por el propio Estado, para crear un enemigo interior -el enemigo dentro- ya sean bandas juveniles o grupos políticos. El aumento de la militarización de la sociedad está por tanto justificado, con una presencia cada vez mayor de tropas en las calles y aeropuertos militares, y el incremento de las fuerzas policiales militarizadas.

lunes, 16 de junio de 2014

Presidente habemus: mandato por la paz con injusticia social

Santos ha sido elegido nuevamente presidente de Colombia, con un 51% de los votos emitidos, en medio de una perenne crisis de legitimidad -la abstención nuevamente fue la ganadora, llegando al 52%, más 4% de voto en blanco. Más de la mitad del electorado no se acercó a las urnas pese al terrorismo histérico mediático, que de lado y lado describía panoramas apocalípticos después del 15 de Junio, o a las encuestas amañadas. El triunfo de Santos no debería sorprender a nadie: las elecciones no definen nada, sino que sancionan apenas, con un tenue barniz democrático, lo que ya estaba decidido. Con el respaldo del capital financiero, de los empresarios, de los EEUU y de la Unión Europea, era imposible que Santos perdiera. Como dijera el profesor Renán Vega en una entrevista “Las elecciones simplemente son como el cierre de esos proyectos en marcha que llevan mucho más tiempo de consolidación en el país en términos políticos”[1]
Aunque un sector de la izquierda quiera ver este resultado electoral como un voto por la paz, o más aun, como el equivalente colombiano a Stalingrado o al Día-D (dependiendo de su persuasión ideológica) en la derrota del “fascismo”, lo cierto es que tanto el aumento en la votación de Santos como una cierta baja del abstencionismo, tienen más que ver con la fuerza aplanadora de las maquinarias electorales, particularmente en la Costa caribe[2], incluidas la compra de votos a granel y la mermelada para todos los gustos. Aunque es discutible el peso de la izquierda en el resultado electoral (en ciertas zonas hubo claras transferencias, incluida Bogotá, no así en otras), lo cierto es que la izquierda tuvo un rol clave no en decidir las elecciones, sino en ayudar a lavar la imagen de Santos ante la opinión pública.
Santos inicia un nuevo período de gobierno en la misma crisis crónica de legitimidad del régimen colombiano, pero con una imagen fresca. Este triunfo electoral y todo el manejo propagandístico que se hizo en torno al “candidato de la paz”, han ayudado a disociar su imagen de los falsos positivos, del bombardeo a Ecuador, de su catastrófica gestión social anti-popular, de su ministerio de guerra y de su ministerio de palmicultura, de todos los engaños y promesas incumplidas al pueblo campesino, de los tratados de libre comercio, de la impunidad militar, de la ley de seguridad ciudadana y la criminalización de la protesta… se ha echado una buena cantidad de tierra sobre los muertos de estos cuatro años en que el pueblo no ha dejado de movilizarse y ¿los presos políticos?, muy bien gracias. Santos emerge de la contienda electoral, indudablemente, con una imagen renovada.

Pero importantes sectores de la izquierda hicieron un poco más que esto. Además, al personalizar –junto a los santistas- el proceso de paz en la figura del presidente, han ayudado a que la paz, originalmente una conquista del pueblo movilizado (y en últimas hasta un deber constitucional), pueda ser redefinida en este segundo período de gobierno en los términos de Santos. El presidente tiene las llaves de la paz, ahora sí, bien guardaditas en su bolsillo y no las compartirá con nadie, a menos que sea hacia la derecha. Ya los analistas van sacando sus conclusiones: Santos ha logrado un mandato para avanzar en el proceso de paz, pero tendrá que hacer concesiones al 46% de votos uribistas que ellos interpretan como más mano dura[3]. El mandato por la pax santista, ergo, incluirá bajar las “expectativas” a las FARC-EP y al ELN. Como dice el análisis de la Silla Vacía, el resultado electoral “quizás, ayude a focalizar la discusión en la mesa en lo posible, más que en lo deseable”[4]. O sea, pisar el acelerador para lograr, cuanto antes, la paz con injusticia social. El análisis de Semana es aún más claro al definir que la pax santista consistirá, sencillamente, en “llevar las conversaciones de La Habana y las que se hagan inicialmente en Ecuador, Brasil u otro país con el ELN a que esas dos guerrillas acepten desmovilizarse y desarmarse”[5]. La paz ha sido definitivamente divorciada de los cambios estructurales para superar las causas del conflicto; a lo mejor hay cambios que habrá que hacer, pero nada muy radical, aunque demagógicamente se invoquen “cambios profundos” que solamente pueden creer los más ingenuos[6]. En palabras del mismo artículo de Semana, “Santos no tiene, pues, carta blanca para negociar con las FARC. Las líneas rojas que su propio gobierno se trazó al emprender este camino han sido reforzadas y, si se quiere, reducidas por el resultado electoral”.

domingo, 15 de junio de 2014

No Voto por la Paz, Tampoco por la Guerra

En medio de locas de naranjas e hijos no prestados para la guerra transcurre el actual circo electoral, que llega a su tercer clímax después del 9 de marzo y el 18 de mayo. Al igual que en las anteriores oportunidades hoy salen los payasos protagonistas: desde mujeres de la “clase media”[1] trabajando para Uribe hasta, quienes con la alternativa no tan “Clara”, llaman a votar por el Santismo Positivo. Todo un espectáculo, donde a las de abajo se nos ve de nuevo como simples espectadoras cuyo único rol será legitimar por medio del voto su “democracia”, es decir, la explotación y la miseria durante por lo menos 4 años más. Este articulo pretende analizar brevemente este panorama, pero también proponer líneas de acción y elementos con los cuales podamos romper este guion ya escrito, escapar de él para ser nosotras mismas –las históricamente excluidas- quienes llevemos las riendas de nuestras vidas y nuestras comunidades, barriendo hoy con el bochornoso espectáculo de derechas peleándose e izquierdas tibias cargándole ladrillos al enemigo.

Santos y Zuluaga la misma mierda son:

Matan al pueblo y dicen que no… y lo peor es que hay quienes le creen a uno o al otro. Existe una falsa disyuntiva, impuesta no solo por los medios tradicionales de desinformación sino tristemente también por algunos sectores de la “oposición” que utilizan sus páginas, medios alternativos y espacios para “votar por la paz”. Para efectos ilustrativos me atreveré a comparar la pelea entre Santos y Uribe con los hoy problemas entre Clara López –ex candidata del Polo- y Jorge Robledo –senador reelecto del mismo-, guardando las distancias necesarias para este ejercicio: Por un lado Santos se nos muestra en esta coyuntura como un político táctico, pragmático, que ve en la “paz” una necesidad económica que permita a la burguesía nacional e imperialista sacar más provecho de la explotación de nuestras tierras sin elementos de resistencia en su contra. Bien sabemos que Santos no cree en la justicia social, con paz o sin ella, y que mucho menos renunciará a los intereses de clase que él representa; en esa misma línea pero en el espejo izquierdo nos encontramos con Clara López, también con Iván Cepeda, Gustavo Petro, el Partido Comunista Colombiano (atrincherado en la burocracia de la Unión Patriótica) y una larga lista de militantes identificados anteriormente con líneas revolucionarias, que si bien no creen en Santos (como tampoco él no cree en ellas ni en su concepción de paz), por táctica y pragmatismo llamaron a votar por él, pero no por él, sino a votar por la “paz” (ahora la “justicia social” se diluyó) o en “contra” de Uribe, para sonar más bonito.

En la otra cara del asunto nos encontramos con Uribe, un hombre que va con exactamente los mismos objetivos que Santos, pero la falta de táctica y pragmatismo le llevan a no pensar con la cabeza fría: se cree el dueño del país, el libertador de la causa de la patria en contra del “castro-chavismo” y el salvador que tanto necesitamos, todo ello alimentado por su deseo de sangre y venganza que eleva la guerra a otro nivel, aunque quiera ocultarla a través de su títere Zuluaga; Jorge Robledo y otros militantes que giran orbitalmente alrededor suyo se caracterizan también por tener un elevado ego, no piensan tácticamente en correspondencia con su línea política[2] (que no tiene nada de obrera, independiente ni revolucionaria), además de creerse los salvadores de la causa de los pobres, donde sin Robledo no existe oposición en el país. Ya de la izquierda se hablará más adelante, de momento profundizare sobre la “disputa” entre Santos y Zuluaga.

La burguesía no es una clase estática, por el contrario se acomoda al camino más sencillo que tiene para, al mismo tiempo, mantener alta la producción y detentar el poder, es por eso que es una clase revolucionaria (entendida como dinámica, en siempre movimiento, transformando las condiciones de producción permanentemente), especialmente en momentos de crisis tanto económica como política. Sabemos que a nivel internacional el capitalismo se está repensando a sí mismo, donde ya entrado en una fase más consolidada de aldea global plantea nuevas estrategias de aniquilamiento de la resistencia social organizada: por un lado ofrece parte de su aparato a viejas enemigas para que le ayuden a administrar su negocio estatal y a su vez apaciguar la llama de indignación (Chile o Uruguay, por ejemplo, o si se quiere el exguerrillero del M19 Gustavo Petro, hoy alcalde de Bogotá y pieza clave del programa Santista); en otros casos ha prescindido de sus viejos aliados quienes encaraban una forma de reprimir que a su vez ponía pueblos en contra del apoyo extranjero a estos regímenes (como en el caso de Irak o más recientemente en Egipto); tenemos también una estrategia de aniquilación, no solo a procesos insurgentes sino a actores sociales potencialmente revolucionarios, que se está llevando a cabo también no solo en Colombia si no en conflictos alrededor del mundo, como en medio oriente (la guerra del Estado Turco contra el pueblo kurdo, por ejemplo); finalmente también ha decidido ceder en su estrategia militarista (sin abandonarla por completo) y negociar con diferentes procesos armados, intentando llegar a acuerdos que les lleven a escenarios donde se entre al juego burgués (el caso por ejemplo del ETA en España, el IRA en Irlanda y obviamente las FARC y el ELN en Colombia). Hoy la burguesía nacional se encuentra dividida en dos concepciones de los medios a utilizar: el ala Santista que pretende llegar a un espacio como el primero y el ala militarista de Uribe que pretende ir desgastando militarmente a las insurgencias. Pero en ambos casos el objetivo final es el mismo, y nuestro destino también será el mismo para ambos programas: se explotados o morir luchando.

miércoles, 11 de junio de 2014

¿La mal llamada izquierda colombiana tras la paz o tras una cucharadita de la mermelada de Santos?

La alineación de la mal llamada izquierda en torno a la paz santista evidenció la colosal inconsistencia
ideológica y conceptual o, por lo menos, la alta dosis de ingenuidad y/o oportunismo, de aquellos que se hacen llamar izquierdistas o “izquierdoides” enColombia. También quedó en claro que tras ese fervor por la paz Santista hay un velado anhelo por lograr una cucharadita de mermelada. Todo el mundo coincide en que la diferencia entre la solución a la guerra civil colombiana propuesta por Santos y la de Zuluaga “…no es más que una farsa, un escenario mediático que pretende trasladar a la inmensa mayoría de colombianos, la responsabilidad por una guerra de la que los únicos responsables son las dos facciones políticas oligárquicas y violentas que se disputan hoy el control del Estado en Colombia” (Timoleón Jimenez Timochenco. Del dilema mediático al dilema real. Anncol, Junio 06 de 2014) El mismo Timochenco hace ver “…que el Presidente Santos fungió como ministro estrella del segundo gobierno de Álvaro Uribe Vélez, que fue él quien anunció con júbilo al país el ataque del 8 de marzo de 2008 en Sucumbíos, que no puede evadir su responsabilidad en las repudiables crímenes denominados falsos positivos, que fue él quien al tiempo de comunicar la muerte del Comandante Jorge Briceño, conminó furioso a la rendición y entrega de las FARC, so pena de ir a por ellas, que fue él quien ordenó el asesinato del Comandante Alfonso Cano mientras intercambiaban mensajes en torno a un posible proceso de conversaciones, y quien incluso reconoció haber llorado de felicidad al conocer la noticia. Mal puede presentarse como el hombre de la paz”. Y se sabe de sobra que la paz de Juan Manuel no es más que un caramelo reeleccionista, el que se agotará una vez pasen las elecciones salga quien salga elegido. Post elecciones presidenciales, vendrán los inamovibles del régimen, no dejar de lado que no será Santos ni Zuluaga quienes decidirán qué acordar con la insurgencia; eso depende de los intereses de dominación geoestratégica del Pentágono. Siguiendo a Timochenco, “Santos menosprecia cualquier reforma de amplio contenido democrático, o que implique el menor cambio en la inequitativa distribución de la tierra y la riqueza en el país”. Así mismo sostiene el jefe guerrillero que la paz de Santos, “implica necesariamente que todo siga igual. Que no se toquen para nada las causas que han originado la confrontación del último medio siglo enColombia”; y agrega, “…no escuchamos una sola palabra de sus labios que significara algún estímulo esperanzador o que tuviera la aptitud de inspirar confianza en los sectores populares afectados por las políticas de su gobierno”.
Queda claro que, al final de la partida, Santos y Zuluaga expelerán el mismo miasma putrefacto de los cadáveres de campesinos y luchadores sociales que dejen militares y paramilitares regados por campos y ciudades a lo largo y ancho de la nación, pues si las FARC no deponen las armas tan solo por algo de plata y unas cuantas curules la guerra se prolongará ad infinitum.



Carta abierta anarquista a quienes viajan al Mundial de la FIFA

Saludos gente extranjera. Lamentamos interrumpir tu celebración, pero dadas las circunstancias necesitamos que comprendas el contexto real de la Copa del Mundo de fútbol que vienes a ver. Sólo queremos que estés al tanto de informaciones que el gobierno de Brasil y tu agencia de viajes muy probablemente no te dijeron.

La Copa del Mundo asignada a nuestro país por la FIFA tuvo un gasto, hasta el momento en que esta carta es escrita, de 25 mil 600 millones de reales, que vendrían a ser 11 mil 500 millones de dólares. De esta cantidad, más del 83 % proviene de las arcas públicas, dinero de los impuestos de la gente común. El salario mínimo en Brasil es de 724 reales por mes ($ 325), las entradas para los juegos pueden llegar a casi un millar de dólares, así que el trabajador brasileño paga por un evento al que no puede asistir. Según una encuesta reciente, el 75,8 % de los brasileños se han mostrado contrarios a las inversiones realizadas para esta Copa del Mundo.

Nuestro país aún tiene 3,7 millones de niños y adolescentes fuera de la educación formal y un índice de casi 10 % de analfabetismo según la UNESCO. Cómo si tales deficiencias educativas no fuesen suficientes, el gobierno impuso suspensión de actividades escolares durante el Mundial. Vivimos en un país donde más de 242 mil familias no tienen electricidad, por no hablar de la salud pública que aún está lejos de ser aceptable, a pesar de lo cual el ídolo del fútbol Ronaldinho publicamente se atreve a decir que "Con hospitales no se hace la Copa del Mundo".

Hoy vivimos una situación económica muy difícil, donde la población soporta una de las cargas de impuestos más altas del mundo; sin embargo, casi el 50% de nuestro PIB está siendo utilizado para pagar una deuda pública absurda mientras el pueblo pasa hambre, o sea, casi la mitad de la riqueza que producimos se va directamente a los bolsillos de unos pocos banqueros; además, también se pierde una gran cantidad por la corrupción y la mala gestión de los fondos públicos.

El gasto excesivo en la Copa del Mundo es solo la punta de este iceberg. En nombre de la Copa, se violaron muchos derechos civiles, un hecho para nada inusual en un país en el que tenemos una policía altamente militarizada, que ya incluso ha sido criticada por organismos internacionales tales como Amnistía Internacional y la propia ONU, la cual hizo una recomendación para suprimir la PM (policía militar brasileña). Las comunidades cercanas a los estadios paddecerán un cerco policial ostensivo y truculento, incluyendo la presencia del ejército, no para garantizar la seguridad de quienes allí habitan, sino la de ustedes, los turistas, como ya es el caso en el Complexo da Maré [en Rio de Janeiro], que hace semanas está ocupado por el ejército, la marina y la PM, con más de 2.500 hombres. El derecho a la vivienda tampoco quedó fuera de la mira del gobierno y de la FIFA, miles de familias han sido desplazadas debido al evento, incluyendo a las familias indígenas de Aldeia Maracanã [tambien en RJ], que a pesar de la resistencia, fueron desalojados violentamente.

En el régimen "democrático" en el que vivimos, tampoco es novedad para nosotros padecer esta injerencia militar, lo que ya ha ocurrido con el ejército como fuerza represiva que ocupa el lugar de construcción de una central hidroeléctrica en el corazón de la Amazonia (Belo Monte), para evitar la protesta de los pueblos originarios y las comunidades locales afectadas por la represa. Por otra parte, a causa de la presión para construir los estadios a tiempo para la Copa Mundial, más de una docena de trabajadores murieron en las obras de construcción.

Aparte de todos estos problemas, la prostitución infantil en el país sigue siendo una realidad que afecta a cerca de 500.000 menores de edad de acuerdo con el Foro Nacional para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil. Este escenario será potencialmente agravado por la celebración de la Copa.

Muchos de nosotros estamos indignados y hemos tomado las calles en protesta, pero el gobierno -respaldado por los grandes medios de difusión- trata de ocultar y disimular todo lo aquí denunciado, a la vez que criminaliza las manifestaciones y nos reprime con su aparato militar, con saldo de violaciones de los derechos humanos denunciadas por ONG's y organismos internacionales.

El Estado y las burocracias partidistas que lo gestionan no atienden y nunca atenderán como es debido a las demandas populares. Si necesitamos de asistencia sanitaria, educación, vivienda, trabajo tendremos que lograrlo a través de nuestra unidad y lucha.

Recibe esta carta como una solicitud de apoyo. Comparte esta información con la mayor cantidad de gente posible, ayudándonos a mostrar al mundo una realidad que el gobierno, la FIFA y los patrocinadores de la Copa a toda costa tratan de ocultar.

[Original en portugués en http://i-f-a.org/index.php/es/; traducido por la redacción de El Libertario.]

domingo, 8 de junio de 2014

LAS COMUNIDADES DEL TOLIMA MARCHARON EN DEFENSA DEL AGUA Y LA VIDA

El país está paralizado y expectante sólo a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. Otra vez la propaganda logra su objetivo, se ha posicionado el voto del miedo y nuevamente la gente no ve otro escenario más que ‘votar por el menos malo’. Pero no todos han olvidado que el voto no es el único espacio de participación política, que grandes cambios se han logrado en las calles. Mientras la mayoría esperan el día de votaciones en el Tolima se realizó una gran fiestapor la Vida: La Sexta Marcha Carnaval en defensa del Agua y la Vida.


Multitudinaria fue la VI Marcha Carnaval en defensa de la Vida, el Agua y el Territorio que se realizó en Ibagué el pasado 5 de junio.  Como un río de gente, la marcha recorrió las calles las principales calles de la capital tolimense con música, danza y alegría para manifestar una vez más que el agua el agua vale más que el oro, que las comunidades de Cajamarca, del Tolima y de toda Colombia no permitirán que la mayor despensa agrícola del país se destruya por la codicia y la fiebre del oro. 

El SENA y la Universidad del Tolima fueron los puntos de concentración para las diferentes delegaciones que se sumarían a participar en esta gran marcha.  Desde tempranas horas de la mañana, los estudiantes de la Universidad del Tolima preparaban  carteles con mensajes en defensa del agua y en contra de la explotación minera de  Anglo Gold Ashanti; muchos plasmaron los mensajes en sus cuerpos con figuras de naturaleza pintadas en sus torsos; se preparaban también artistas en zancos, malabaristas y grupos con tambores para animar las consignas.


viernes, 6 de junio de 2014

[Barcelona] Días 5 y 6 de la revuelta de Can Vies

Barcelona vive unos días muy agitados a consecuencia del desalojo del Centro Social Autogestionado Can Vies.
Son escenas muy potentes de autoorganización y lucha que se pretenden extender más allá del barrio de Sants. Comenzaremos a relatar los dos últimos días de las movilizaciones a favor de Can Vies de forma cronológica.

El quinto día, el viernes, estaba pensado como día de descanso en Sants. Era necesario tomar fuerzas, puesto que la semana había sido intensa. En este caso se planteó una cacerolada en la Plaza de Sants que terminó con un turno abierto de palabra. Allí intervino un chico inmigrante de la nave desalojada del Poblenou que provocó numerosos aplausos. Durante ese día Can Vies había realizado una rueda de prensa en Can Batlló, para negar las informaciones de la prensa que decían que Can Vies estaba negociando con el ayuntamiento. "No habrá negociación con quien ha derruido el edificio". Y se hablaba de reconstrucción y se pedía la dimisión del regidor de Sants, Jordi Martí y del alcalde de Barcelona, Xavier Trias.
Por otro lado se prepararon numerosas concentraciones de solidaridad en otras ciudades. Por ejemplo en Madrid, Zaragoza o Sevilla. Era el #EfecteCanVies, que se iba extendiendo. También hubo concentraciones y acciones en otros puntos de Catalunya. Por ejemplo en Gracia se entró en una sede de distrito de Convergència i Unió y se sacaron los muebles a la calle, después de reventar sus cristaleras. Los ataques a sedesde CiU han sido una constante durante estos días. Por contra, algunos militantes de este partido decían que los disturbios de Can Vies perjudicaban el Proceso soberanista. También dejaban correr rumores de que detrás de los disturbios estaba en CNI. Totalmente infundados y totalmente perdidos.
El día siguente, el sexto, el sábado.
Este día comenzó con la reconstrucción de Can Vies. El edificio está derruido a medias, solamente lasala de baile fue demolida, y la estructura de lo que queda de edificio no parece tan tocada. Centenares de personas del barrio fueron a ayudar en las tareas de reconstrucción. Para empezar había que quitar los escombros. Para ello se formó una larguísima cadena humana que envió los escombros a la puerta de la sede del Distrito, que se formó una montaña en la mismísima puerta. Había un mercado de paradas comerciales en Carretera de Sants que hizo pasillo a la cadena. También se decoró la grúa y se plantó nuevamente la bandera de Can Vies en el tejado.



lunes, 2 de junio de 2014

ESPAÑA: LOS ANARQUISTAS ANTE LA ABDICACIÓN DEL BORBÓN.


"...la izquierda está pidiendo a gritos un referéndum y la III República. Los anarquistas no queremos ni monarquía ni república. No queremos Estado, lo maneje un rey hereditario o un presidente electo. El problema es el Estado, el sistema que mantiene la explotación y la desigualdad, sea quien sea su titular.."

[Documental] Bakunin, anarquista, 200 años

El Grupo Anarquista Albatros, nos presenta un Documental de su propia cosecha para celebrar el bicentenario de Miguel Bakunin. Construido de manera sencilla y apoyado en las entrevistas de Ana Siguenza y Julian Vadillo, que nos acercan de manera didactica y rigurosa a Bakunin, libertario y librepensador. Con una mesa redonda abierta y conformada por Paco Salamanca, Juan Pablo Calero y Javier Anton, nos mantienen con decisión y aplomo, a través de sus acertadas intervenciones, muy atentos durante la narración que realizan y que impregna de actualidad todos los conceptos, ideas y pensamientos de Miguel Bakunin. Salud



¡HAN CAPTURADO LA POLÍTICA Y SE HAN ROBADO EL FÚTBOL!

En las últimas semanas los medios masivos colombianos han dividido su tiempo para abordar primordialmente las dinámicas de dos fenómenos distintos pero, en realidad, poco distantes: el mundial de fútbol Brasil 2014 y las elecciones presidenciales en lo que desfasadamente se denomina la democracia colombiana.
Las álgidas dinámicas de cobertura mediática del mundial y la batalla electoral ocultan las problemáticas sociales, políticas y económicas ligadas a tan importantes sucesos. En esta columna se propone una lectura de estos dos asuntos que se conecte con el despliegue del modelo económico que se ha impuesto a escala global y se yergue hoy como incuestionable.
Entonces, es necesario traer a colación al flaco Menotti1, cuando afirma que “después de lo que he vivido, me siento un marxista hormonal, sin más explicación ideológica. Durante 70 años de mi vida he comprobado el desastre que ha hecho el capitalismo en todo lo que me rodea, incluido el futbol”2.
En este marco, es necesario llamar a las cosas por su nombre. Antes de hablar del mayor evento del deporte rey en Brasil y de la justa “democrática” en Colombia, se debe hablar del robo del fútbol y de la captura de la política a manos de las voraces fauces de las élites que dinamizan el capitalismo contemporáneo. En dos semanas comienza el mundial y el 15 de junio se deciden las elecciones presidenciales en Colombia. El reto de lograr un fútbol y una política acordes a los sueños y el disfrute de las mayorías nos enfrenta a grandes luchas.
La captura de la política colombiana
Aun cuando se pregona a los cuatro vientos que la democracia colombiana es la más antigua en América Latina, tal afirmación oculta las porosidades de un sistema político que dista de dinámicas realmente democráticas. Las actuales dinámicas de re-producción de la “democracia” colombiana nos enfrentan a un pavoroso declive de la participación, el disenso y la reflexión ciudadana, siendo estos elementos constitutivos de la vida política en un contexto democrático. En contrapartida el espacio político ha sido capturado por mafias cuyos intereses desbordan los horizontes nacionales.
En primer lugar, la oferta de la política institucional gravita en torno a un núcleo programático idéntico en términos de la concepción de la política y la economía. El pensamiento único, aún cando hay matices, es unánime. Al ver las propuestas de los partidos políticos en las dos jornadas electorales realizadas este año, la única que se sale del culto al actual modelo económico, así lo haga de manera tenue, es la del PDA.
En segundo lugar, en Colombia el mecanismo de participación política por excelencia es el voto. Ello no es novedad en una democracia representativa. La particularidad es el alto nivel de abstención que supera, de lejos, el 50% más uno de la población apta para votar3. Siendo el mayor escenario de participación política, más de la mitad de la población queda excluida.