Pronunciamiento de la Asociación Nacional de Zonas de
Reserva Campesina - Anzorc
En menos de 48 horas fueron asesinados Gustavo Adolfo Pizo
en Totoró, Alonso Lozano en Mapiripán y Hermes Vidal en Tierralta. Los tres
líderes campesinos, los tres vinculados a la lucha por la tierra y por la
dignidad del campesinado. Los tres reclamaban la tierra arrebatada, el
territorio para el campesinado, las Zonas de Reserva Campesina.
Estos viles asesinatos no son hechos aislados, son el
resultado de semanas de incitación al odio, de ataques, de atentados, de
señalamientos contra las organizaciones sociales del campo, contra las Zonas de
Reserva Campesina de Colombia. La muerte es el resultado del odio fabricado
contra nosotros.
Le exigimos al gobierno de Colombia, al presidente Santos,
pronunciarse sobre esta ola de violencia contra el campesinado. Exigimos
justicia. No tiene sentido hablar de restitución de tierras, de Zonas de
Reserva Campesina y de paz sin el derecho fundamental a la vida. El gobierno
debe implementar inmediatamente un plan, una ruta que brinde plenas garantías
políticas a los que luchan por la tierra y la paz en este país. Le exigimos al
gobierno que la semana entrante se siente con las organizaciones campesinas
para diseñar y empezar a implementar un plan de protección urgente.
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