sábado, 31 de mayo de 2014

¿Espacio para la especulación urbanística o para la vida?

El Plan de Gobierno, el POT y el "mega proyecto" cinturón verde para el Área metropolitana, Jardín Circunvalar, tres iniciativas de importancia estratégica para Medellín, aprobadas –o en proceso de serlo– sin conocimiento pleno ni debate profundo por parte de los habitantes de la ciudad. Consecuencias y retos abiertos por estas decisiones.

La ciudad debe ser un tejido de lugares para el buen vivir o se convertirá en un espacio fragmentado, de segregación y exclusión social, sin conexión y sin calidad, para vivir en estrés ambiental, de movilidad, ecológico y de trabajo.
Medellín, una ciudad con escaso suelo urbano y rural aprobará su POT en septiembre próximo, en un proceso que no concita el debate profundo de sus normas, con conocimiento de causa por parte de la ciudadanía. El eje central de la discusión por dar, debería versar por tanto, sobre los usos del suelo, en una movilización de sus habitantes por mts2 para el buen vivir de todos y todas, para una vida con calidad y bienestar. Debate público reglamentado por la Ley 507/99, que en su artículo 2º ordena a los concejos municipales o distritales, la celebración obligatoria de un Cabildo Abierto previo para el estudio y análisis de los Planes de Ordenamiento, sin perjuicio de los demás instrumentos de participación contemplados en la ley, lo cual está desconocido en el actual proceso de revisión y ajuste del POT.
Pero no sólo no hay discusión sino que lo aprobado es una carta en blanco para que luego la administración municipal, en el curso no mayor a 12 meses –contados a partir de la aprobación del Plan de Ordenamiento– lo reglamente. Vale por tanto preguntar, ¿Será viable aprobarlo cuando sólo presenta criterios y lineamientos sin su base reglamentaria? De esta manera, después de un año de aprobado serán reglamentados asuntos estratégicos para unproyecto de ciudad y para la vida con calidad para sus pobladores (ver recuadro 1)
Cinturón verde, un macroproyecto sin fundamento
Este macroproyecto, aprobado e integrado dentro del POT, es una de las decisiones que más afectará la vida futura de los pobladores de este territorio. En una estrategia de levantar corredores o cinturones "verdes" para contener el crecimiento de la ciudad, desplazará miles de familias campesinas y cambiará el uso del suelo que hoy tienen centenares de hectáreas agrícolas, afectando la oferta alimenticia que hoy llega a la capital de Antioquia.
Déficit de vivienda y lucha por el suelo
El problema de la ocupación informal de las laderas que rodean a Medellín es estructural, pese a lo cual el Estado y la municipalidad no han querido atenderlo. Planeando la ciudad a favor de los menos los más quedan excluidos: la institucionalidad de la planeación y el ordenamiento de la ciudad han construido alternativas innovadoras para ello; mal contadas son entre 4.500 y 5.000 viviendas al año las requeridas para dar solución a las familias que llegan a la ciudad, provenientes de un campo que históricamente adolece de atención por parte del Estado.
 De otra parte, la municipalidad en su falta de continuidad de políticas, desvía o desatiende los acuerdos que a largo o mediano plazo se plasman en instrumentos de ordenamiento de la ciudad, como los planes locales o el mismo POT, razón por la cual entre otras cosas y sin temor a equivocarnos queda sin ejecución el 20 por ciento de lo que estaba previsto en el POT inicial de 1999, y los posteriores ajustes conocidos hasta el día de hoy.
 Hemos aprendido a hacer ciudad, es cierto, pero para no más del 30 por ciento de la población de Medellín, para el restante 70, incluyendo el territorio rural-campesino, no se ha hecho ciudad, lo poco que existe en el campo y las laderas urbanas las han construido las comunidades populares y campesinas con sus propias manos y muchas de éstas son informales porque la inmobiliaria urbana, la institución y el Estado, así lo quieren.


"Se necesita comida, no fútbol": grafiteros brasileños se indignan por el Mundial.

Los artistas callejeros han cubierto las paredes en las calles de Río de Janeiro y Sao Paulo con imágenes que culpan al organismo directivo del fútbol, la FIFA, por la explotación de Brasil y al Gobierno local, por dejar de lado las necesidades de los pobres.
Los pintores comparten la creencia de muchos indignados, quienes opinan que los 11.000 millones de dólares que se han gastado en la Copa del Mundo ­—contando el "dinero robado"— deberían haber sido utilizados para mejorar el transporte, la sanidad y la educación.
"Es una buena manera de exponer los problemas del país", dijo a 'The Guardian' el artista del grafiti Pauo Ito. "Si el Gobierno no quiere exponer estas cosas es porque se siente avergonzado. Si se sienten avergonzados por esto, tendrían que tomarlo más en serio, por lo menos, esa es nuestra intención".
La indignación de las personas solo va en aumento a medida que el torneo se acerca, incluso la sesión de entrenamiento de la selección brasileña antes del evento fue centro de las protestas.












miércoles, 28 de mayo de 2014

Protestas antimundial en Brasil alcanzan a la verdeamarela

Alrededor de 200 profesores en huelga rodearon el hotel de Río de Janeiro donde se alojaron los futbolistas convocados por el seleccionador Luiz Felipe Scolari, gritando consignas en demanda de más inversiones en educación y en protesta contra los millonarios gastos públicos para preparar el país para el Mundial.

¡No va a haber Copa!, gritaban los manifestantes, que llegaron a abuchear a los jugadores brasileños cuando salieron del hotel en autobús rumbo a la concentración de Granja Comary, en la ciudad serrana de Teresópolis, que será el hogar de la verdeamarela durante el Mundial.
¡No me interesa la Copa! ¡Quiero más dinero para la salud y la educación!, coreaban algunos con narices de payaso.

El autobús estuvo bloqueado por los manifestantes por un momento y al cabo de una media hora pudo finalmente partir escoltado por la policía hacia elcentro de entrenamiento. Los manifestantes intentaron bloquear nuevamente el paso del autobús en la carretera cercana al aeropuerto, pero éste se desvió de último momento, aceleró y pudo esquivarlos.
Las protestas se repitieron en la llegada de la verdeamarela a Teresópolis, donde la fuerte protección policial no impidió la exigencia de otorgar más presupuesto a la enseñanza. Los maestros valen más que Neymar, decía uno de los carteles exhibidos por el grupo, que incluía a estudiantes y a militantes de partidos políticos de izquierda. El gobierno dice que invierte mucho más en educación que en el Mundial, pero no podemos comparar las dos cosas, porque salud y educación son permanentes, y la Copa dura un mes, expresó uno de los líderes de los manifestantes en declaraciones a la edición electrónica del diario O Estado de Sao Paulo.
Los profesores de la red de enseñanza pública del estado de Río de Janeiro están en huelga desde el 12 de mayo, en reclamo de un aumento de 20 por ciento para todos los trabajadores de la educación municipales y estatales. Al acercarse el Mundial, varios sectores han entrado en paro. La hostilidad de la población hacia el Mundial también se reflejó en la actitud de un joven habitante de Teresópolis, quien incendió recientemente una réplica de la Copa del Mundo elaborada por artistas locales e instalada en la entrada de la ciudad para saludar a la verdeamarela.
La presencia de los grupos antimundial llevó a las autoridades a armar un fuerte esquema de seguridad para proteger a los jugadores en Granja Comary, modernizada y reformada a un costo de 15 millones de reales (unos 6.75 millones de dólares), financiados por la Confederación Brasileña de Futbol (CBF). Según se informó, 74 agentes vigilarán todos los accesos al lugar donde se concentra la selección brasileña, el elegante barrio Comary, ubicado cerca de la entrada de la ciudad de 167 mil habitantes.
Scolari advirtió que el trabajo de preparación se realizará en total aislamiento, y que no se permitirá el acceso de aficionados a los entrenamientos en Granja Comary, que sólo podrán ser seguidos por la legión de más de mil 500 periodistas acreditados.

Por otra parte, el técnico aseguró que las protestas que sacuden Brasil desde junio del año pasado no afectan a sus pupilos. Ellos no prestan atención a eso, aseveró Felipao, quien destacó que el equipo no es responsable de la precaria situación de los servicios públicos y de la infraestructura en Brasil. El que tiene que construir carreteras no es el futbolista, tampoco la CBF, sino el gobierno. Nosotros sólo tenemos que explicar que la función de ellos es jugar a la pelota, agregó.

El coordinador técnico, Carlos Alberto Parreira, minimizó las protestas, pues aseguró que en cuanto comience el Mundial el pueblo apoyará al equipo. Tengo absoluta certeza que la selección es un patrimonio cultural y deportivo del pueblo brasileño, que la apoyará durante el torneo, afirmó.

domingo, 25 de mayo de 2014

¿Por qué no votan las anarquistas?

Nos hacen esta pregunta una vez más. Cada convocatoriaelectoral, y principalmente desde “las izquierdas”, poniéndose la venda antes de hacerse la herida, culpan al abstencionismo de la hegemonía de la derecha en la farsa electoral. Es una pregunta que no tiene una respuesta simple. En primer lugary frente a lo que a algunos, y no precisamente anarquistas, les gustaría, el anarquismo no es un dogma, nunca se planteó que tenía la verdad revelada en sus manos, en consecuencia ha operado siempre, a la vez que en lo social y lo cotidiano, en una labor de crítica y reflexión permanente. El preguntar por qué no votamos es equivalente a preguntar ¿cómo concibe el anarquismo la intervención política? ¿Considera el anarquismo que hay un nivel político en el que se debe actuar? ¿Las elecciones no son parte sustancial de toda práctica política?¿Ningún anarquista vota nunca?
Entendemos que, mientras el pueblo alimente, mantenga y enriquezca a los grupos privilegiados de la población mediante su trabajo, incapacitado para el auto-gobierno por verse forzado a trabajar para otros y no para sí, estará invariablemente regido y dominado por las clases explotadoras. Esto no puede remediarlo ni siquiera la constitución más democrática, porque el hecho económico es más fuerte que los derechos políticos, que carecen de significado sin igualdad económica.
Mientras el sufragio universal se ejerza en una sociedad donde la mayoría de la población está económicamente dominada por una minoría que controla de modo exclusivo y excluyente la propiedad y el capital; por libre que pueda parecer el pueblo desde el punto de vista político (libertad política que, muchos ya lo han comprobado, se reduce a poder elegir la papeleta que metes en el sobre, ojito con ir más allá), esas elecciones sólo pueden ser ilusorias y antidemocráticas en sus resultados, que invariablemente se revelan absolutamente opuestos a las necesidades y a la verdadera voluntad de la población.
Bajo el capitalismo, la burguesía está mejor equipada que los trabajadores para hacer uso de la democracia parlamentaria. Es cierto que las clases dominantes saben mejor que el pueblo lo que quieren y lo que deben tener: el propósito que persiguen no es nuevo ni inmensamente vasto en sus fines, como acontece con el nuestro. Al contrario, es un propósito conocido y completamente determinado: la preservación de su dominio político y económico.
La falsedad del sistema representativo descansa sobre la ficción de que el Gobierno o y las Cortes o Parlamento surgidos de elecciones deben representar la voluntad del pueblo, o al menos de que pueden hacerlo. El pueblo quiere instintiva y necesariamente dos cosas: la mayor prosperidad material posible dadas las circunstancias, y la mayor libertad para sus vidas, libertad de movimiento y libertad de acción.

¿Cómo puede el pueblo controlar los actos políticos de sus representantes? ¿No es evidente que el control ejercido en apariencia por los electores sobre sus representantes es, en realidad, una pura ficción?
Abismo entre quienes gobiernan y quienes son gobernados: las finalidades de quienes gobiernan —de quienes elaboran las leyes del país y ejercitan el poder ejecutivo— se oponen diametralmente a las aspiraciones populares debido a la posición excepcional de los gobernantes y de la clase política en general: sean cuales fueren sus sentimientos e intenciones democráticas, sólo pueden considerar esta sociedad desde la elevada posición en la cual se encuentran. La posesión del poder induce a un cambio de perspectiva. Tal ha sido la eterna historia del poder político desde el momento mismo de establecerse en este mundo. Esto explica también por qué y cómo hombres demócratas y rebeldes de la variedad más roja, se hicieron extremadamente conservadores cuando llegaron al poder. Por lo general, estos retrocesos suelen atribuirse a la traición. Pero es una idea errónea; en su caso, la causa dominante es el cambio de posición y perspectiva.
Puesto que el Estado político no tiene otra misión que la de proteger la explotación del trabajo por parte de las clases económicamente privilegiadas, el poder de los Estados sólo está destinado a oponerse a la libertad del pueblo. Quien dice Estado dice dominación, y toda dominación supone la existencia de masas dominadas. Por consiguiente, el Estado no puede tener confianza en la acción espontánea y en el movimiento libre de las masas, cuyos intereses más queridos militan contra su existencia. Es su enemigo natural, su invariable opresor, y aunque tiene buen cuidado de no confesarlo abiertamente, tiende a actuar siempre en esta dirección. Por democrático que pueda ser en su forma, ningún Estado puede proporcionar al pueblo lo que necesita, es decir, la libre organización de sus propios intereses de abajo arriba, sin interferencia, tutela o violencia de los estratos superiores. Porque todo Estado, hasta el más republicano y democrático es esencialmente una máquina para gobernar a las masas desde arriba, a través de una minoría privilegiada, que supuestamente conoce los verdaderos intereses del pueblo mejor que el propio pueblo.
De este modo, incapaces de satisfacer las exigencias del pueblo o de suprimir la pasión popular, las clases poseedoras y gobernantes sólo tienen un medio a su disposición: la violencia estatal, en una palabra, el Estado, porque el Estado implica violencia, un gobierno basado sobre una violencia disfrazada o, en caso necesario, abierta y sin ceremonias.
La producción capitalista y la especulación financiera se llevan muy bien con la llamada democracia representativa; porque esta forma moderna del Estado, basada sobre una supuesta voluntad y soberanía popular, supuestamente expresada por los representantes en los parlamentos, unifica en sí las dos condiciones necesarias para la prosperidad de la economía capitalista: sometimiento efectivo del pueblo a la minoría que teóricamente le representa e identificación con los valores “sociales”.

Los anarquistas hemos votado en muchos lugares e instancias: sindicatos, cooperativas, centros sociales y populares, asambleas. El problema no es el voto ni la democracia. La cuestión es a qué mecanismo pertenece tal voto y de qué democracia hablamos.
En estas circunstancias, cuando la agresión ideológica del sistema es alta, cuando los medios de comunicación son la única fábrica de opinión, cuando coordinarse y movilizarse se criminaliza y reprime, cuando la miseria de las poblaciones crece… hay una búsqueda -en la que está mucha gente- de herramientas que permitan la lucha. En esa búsqueda queremos estar. No es tanto el votar o no votar, sino qué hacemos entre convocatoria y convocatoria electoral y en qué condiciones nos “enfrentamos” a las mismas.

jueves, 22 de mayo de 2014

El proceso de paz ¿secuestrado por el miedo?

No deja de sorprenderme la poca capacidad que tenemos de aprender de nuestra experiencia y de nuestra historia. A una semana de las elecciones y en medio de encuestas amañadas (como siempre son amañadas las encuestas en Colombia) que dan una victoria técnica a Zuluaga, candidato de la derecha belicosa y ultramontana, muchos son presas del pánico y corren, de buenas o malas, a respaldar a Santos, candidato de la derecha neoliberal que hoy negocia en medio de los bombardeos, pero que ayer fue responsable político de los falsos positivos y mañana… puede ser cualquier cosa. Porque si ha habido un camaleón en la política colombiana es Santos, que se ha paseado en los últimos veinticinco años por las oficinas de todos los gobiernos que ha habido. Fue el más uribista de los uribistas por la mayor parte del negro período 2002-2010. No olvidemos que llegó al poder como el mismísimo ungido de Uribe Vélez y negoció con la insurgencia porque era la mejor alternativa que tenía en medio de un escenario ascendente de luchas populares, una guerrilla que había asimilado los golpes del Plan Colombia y que comenzaba a golpear más duro que nunca, y de la necesidad de pacificar al país para la implementación de su Plan de Desarrollo Nacional.

Santos no es un convencido de la paz, ni con justicia ni con injusticia social. Sencillamente persigue los intereses de la clase social a la que representa. Si el día de mañana le conviene nuevamente más la estrategia militarista, él mismo lo ha dicho: patea la mesa y vuelta a la guerra como si nada. Por eso es que no le pone el bozal al ministro Pinzón que no para de ladrar contra el proceso de paz.

No está de más recordar, una vez más, que el proceso de paz no es, ni ahora ni ayer, una concesión benevolente de la oligarquía. La instalación de la mesa de negociaciones es un triunfo de la lucha del pueblo colombiano, de los sectores que no se amedrentaron ante la guerra total del régimen y que resistieron la imposición de su modelo a sangre y fuego; de quienes han insistido que el conflicto social y armado colombiano tiene causas estructurales y que son esas causas las que deben resolverse para poder superarlo. Precisamente todo aquello que el establecimiento y sus obsecuentes medios negaron a rajatabla durante el período de Uribe en el poder, y que hoy aceptan con muchos peros y a regañadientes. Porque les toca aceptarlo, porque el pueblo colombiano está empezando a hablar fuerte y claro.

DE CONTESTATARIOS A CÓMPLICES

A propósito de la inminente amenaza que constituye el posible retorno de la mano criminal de Uribe al control del gobierno a través de su pusilánime muñeco Zuluaga, el ahora restituido alcalde y la seguramente restituible senadora han afirmado su apoyo contundente a Santos aduciendo que en él reposa la llave de la paz. Petro y Piedad y con ellos todo aquel que ha decidido reelegir a Santos para “reelegir la paz” han pasado de contestatarios a cómplices. Confundir la impugnación a escenarios funestos como el de la llegada al poder de Uribe y Zuluaga con salidas risibles como la de la reelección de Santos es un error. Entender en el apoyo al opresor una salida hacia un escenario de opresión lo es aún más.
Varios sectores de oposición han manifestado ya la posibilidad de votar por Santos en un repugnante escenario de segunda vuelta en el cual Zuluaga no sólo confronte a Santos sino que además tenga buenas probabilidades de triunfo. Aduciendo al miedo – un miedo veraz, sustentado en 8 años de Uribismo cruento y asesino -, la posibilidad de apoyo a una cara más amable de la opresión se ofrece como una solución dolorosa. Pese a ello, hay dos tensiones que se asoman en una toma de posición como esta. En primer lugar, por cuanto esta toma de posición transgreda el límite de una desesperada última instancia y devenga en un apoyo no sólo anticipado sino entusiasta, hay allí una muestra de traición a un historial de oposición. Las versiones más explícitas de esta primera tensión son los nuevos cómplices Petro y Piedad. La segunda tiene que ver con que un escenario de última instancia no puede hacer perder de vista el horizonte sobre el cual están trazadas las apuestas más profundas de transformación. En la medida en que este horizonte sea la construcción de poder popular por vías distintas a las de un trágico ceñirse al repugnante panorama electoral que nos ofrecen hoy los dos candidatos que puntean las encuestas, la opción entonces debe ser - antes que el miedo y la conmoción – la de la firmeza en una lucha popular que llegue a ser capaz de enfrentar a cualquier criminal con poder.

 La cuestión de la decisión por una complicidad disfrazada de estrategia seguramente pasa por motivaciones múltiples e inciertas de parte de quienes apoyan ahora a Santos: desde conspiraciones no elucidadas hasta fluctuaciones ideológicas bien lesivas. El argumento más claro dentro de todo ello, abanderado por lxs mismxs nuevxs cómplices, es sin embargo el de la necesidad de reelegir a Santos como vía óptima de consecución de la paz y es de hecho de ello de lo que podemos hablar más fehacientemente. Dicho argumento se agota en el hecho mismo de que Santos no es el dueño de una paz que corresponde al pueblo. Varias consideraciones habrían respecto a este punto principal.

domingo, 18 de mayo de 2014

Brasil - Manifiesto del 15-M, Dia Internacional de luchas contra la Copa FIFA 2014

Comité Popular de la Copa - Sao Paulo

El Comité Popular de la Copa en Sao Paulo (articulación horizontal y apartidaría de movimientos sociales, organizaciones, colectivos e individuos) se organiza desde el 2011 para denunciar las violaciones de derechos humanos y fortalecer la resistencia abajo y a la izquierda contra la violencia estatal que se intensifica con la Copa de la FIFA del 2014.

El 15 de mayo del 2014 es el Día internacional de las luchas contra la Copa. Los grupos firmantes tomaremos las calles de la ciudad a partir de las 17 horas en la Plaza del Ciclista (localizada en la Avenida Paulista número 2400). En este manifiesto, mostramos por qué luchamos y lo que queremos; a tan solo un mes de que comience la Copa sin Pueblo, estamos en las calles de nuevo para exigir nuestro derecho a la ciudad y sobre todo, nuestra libertad de manifestarnos. Son 11 nuestras demandas en campo:

1) Queremos recordar que las victorias populares fueron siempre una conquista en las calles, sea en huelgas, protestas, ocupaciones u otras formas legítimas de manifestación y acción política. Las libertades de expresión, manifestación y reunión constituyen un derecho fundamental para la efectividad de la democracia (Constitución federal – artículo 5°). Cincuenta años después del golpe militar de 1964, la libertad de manifestarnos sigue amenazada, limitada, prohibida o relativizada en nombre del “orden público”. Para que podamos exigir nuestros derechos y contestar al orden capitalista vigente, es necesario antes de todo que el derecho de ocupar las vías públicas e interrumpir la cotidianidad de la ciudad sea garantizado.

La respuesta violenta y autoritaria del Estado a los conflictos sociales, que presenta a la fuerza policiaca como única “mediadora”, además de agravar los conflictos, es una forma de violar libertades civiles y políticas y amenazar a la población para que se calle; es imponer a todos una visión única del mundo. En tres años de movilización contra la Copa, no hubo disposición, diálogo o ninguna propuesta de reparación de los derechos violados por parte del gobierno estatal o federal, a pesar de diversas reuniones y audiencias en que exigimos informaciones sobre los proyectos, participación popular en las decisiones y el derecho a la ciudad. Hoy, la LIBERTAD DE MANIFESTACION ANTES, DURANTE Y DESPUÉS DE LA COPA ES NUESTRA PRIMERA Y MÁS IMPORTANTE BANDERA, y por ella es que volvemos a las calles, donde una vez más vamos a buscar nuestros derechos.

Las amenazas y limitaciones al derecho de manifestarse se dan a través de innumerables proyectos de ley que tramitan el Congreso y el Ministerio de Justicia, como el PL 508 o el PL 499. En tiempos de votación de proyectos que tipifican el crimen del terrorismo y que limitan el derecho a la libre manifestación, no son sólo los actos que cuestionan la Copa los amenazados. Con apenas una firma, todos los movimientos sociales pueden acabar encuadrados como terroristas, en una clara tentativa de callar las voces de las calles a través de la criminalización de las luchas populares. Repudiamos y exigimos que se desechen inmediatamente todos los proyectos de ley anti-manifestación que crean un Estado de excepción dentro de la democracia.

viernes, 16 de mayo de 2014

[Vídeo] "Fascism, Inc."

Queremos contaros historias cortas, desconocidas del pasado, el presente y el futuro del fascismo y sus conexiones con los intereses económicos de cada época. Viajaremos desde la Italia de Musolini, a la Grecia de la ocupación Nazi, de la guerra civil y la dictadura y desde la Alemania Nazi de Hitler hasta hoy en día. El documental nuevo seguirá los pasos de Deudocracia y de Catastroika, donde hemos descrito las causas de la crisis de deuda, las consecuencias del memorándum, la abolición de la democracia y la liquidación absoluta del país.
Los creadores de 'Deudocracia' y 'Catastroika', las periodistas griegas Katerina Kitidi y Ari Hatzistefanoum vuelven con un documental nuevo.
El documental FASCISMO SL. aspira a estar inspirado e inspirar los movimientos antifascistas de toda Europa y al mismo tiempo de continuar uno de los experimentos más grandes del periodismo independiente. Por una vez mas rechazamos cualquier financiación de partidos y compañías y comunicamos que el documental circulará libremente, sin restricciones de uso y transmisión. En este caso también os queremos a todos como nuestros coproductores. Podéis contribuir económicamente para la finalización del documental enviando cualquier importe vía Paypal o vía cuenta bancaria, mencionando si NO queréis que vuestro nombre aparezca en los créditos.
“Porque fascismo no es solo la banda de Amanecer Dorado sino también los políticos, los empresarios y los editores que lo han nutrido…"
“Porque la crisis económica que favorece el auge del fascismo y del nazismo la tenemos en frente y no detrás…"

“Porque toda Europa se hunde en la oscuridad de la derecha radical…"


martes, 13 de mayo de 2014

RESEÑA DE LA SEGUNDA FERIA ANARQUISTA DEL LIBRO Y EL FANZINE

El 9, 10 y 11 de mayo de 2014 se llevó a cabo en Medellín la segunda feria anarquista del libro y el fanzine. Durante esos tres días se contó con actividades como charlas, debates y exposiciones que reflejaron parte de las experiencias de trabajo sobre todo las que se vienen desarrollando alrededor de las letras y la escritura. Hubo una muestra permanente de material escrito a cargo de las editoriales, librerías y distribuidoras, además de un taller de encuadernación casera, todo acompañado de teatro, bazares, comidas, cafés y una significativa asistencia no solo de colectivos e individualidades libertarias sino de muchas otras personas afines y gustosos de la literatura anti-autoritaria.
Cabe resaltar la importante relación que el pensamiento y las prácticas anarquistas han tenido con los libros, la escritura y la publicación. Desde siempre, la escritura ha sido esa herramienta de difusión, de propaganda, de diálogo abierto, de desahogo, de incitación y de reflexión política que los anarquistas han utilizado y utilizarán como arsenal dispuesto siempre ha cuestionar las relaciones autoritarias y sus instituciones: la iglesia, la educación, el Estado y el Capital. Y aunque en el presente local, la producción de este tipo de literatura, de periódicos y fanzines no sufre la persecución y criminalización que en otrora tuvo, nada a contracorriente frente al tsunami de las industrias culturales que disponen de gran cantidad de ejemplares, espacios para la distribución, de autores que solo producen obras seducidos por contratos millonarios y por la ambición de ser reconocidos en un medio cada vez más homogéneo y alienante.
Separados también del formato académico, la literatura y la prensa libertaría no pretende establecer verdades absolutas e indiscutibles entre sus páginas, líneas y párrafos. Cuestiona, más no impone un modo único de pensar la sociedad y sus problemas, intriga, más no fabrica montajes o distorsiona los hechos para ganar adeptos o difundir una única visión del mundo, seduce, más no compra públicos y lectores con aquellos temas que se vuelven moda, e invita a la acción, en contraparte con el lector perezoso que ampliamente difunden las redes sociales, los noticieros, y la literatura exprés para lectores afanados.
“Como la no violencia protege al estado”, “Cuentos cortos contra la autoridad”, “Canciones del medio día”, “Táctica y Estrategia en las prácticas anarquistas”, o los fanzines “Mujer y cárcel”, “Delirios compartidos”, los periódicos “El Aguijón 26”, “Mecha cerebral 1 y 2” entre otros títulos, fueron las muestras de esa relación estrecha de anarquismo y literatura en sus múltiples formatos. Aunque es la continuación de la primera feria, habrá que seguir estimulando la escritura y la producción propia, claro está, a la par de la reedición de obras ya publicadas pero poco conocidas y difundidas características de nuestro presente local.
Con gran participación, entusiasmo y compromiso finalizó la segunda versión de la feria anarquista del libro y el fanzine Medellín 2014. Esperamos se consolide y mantenga como un espacio que incentive la producción, la difusión y el diálogo de esa multiplicidad de formas en como puede ser concebido el ideario libertario, la recuperación de la memoria histórica anarquista, la literatura antiautoritaria y los análisis y reflexiones sociales.

El Aguijón. Mayo 12 de 2014

Ahí están pintados, toditicos

El terrorismo de Estado en Colombia no puede explicarse por los descalabros sicóticos de algunos individuos. Es algo demasiado estructural, bien planificado, demasiado sistemático, extendido y persistente como para tener su explicación en las perversiones individuales de un grupo, más o menos numeroso, de ciudadanos sádicos. Aunque nos asombre la sevicia extrema a la que se recurre para torturar y masacrar a los que representen un peligro para la hegemonía de la clase dominante, que incluye todo un repertorio de la crueldad que alcanza el paroxismo en las Casas de Pique, el terrorismo de Estado y su hijo pródigo (el paramilitarismo), no son expresión de una demencia colectiva ni un acto de desquiciados, sino que expresión de una fría política burocrática. La mayoría de los millones de personas que participan en el engranaje del terrorismo de Estado no son sádicos por naturaleza, sino personas que “hacen su trabajo”, que cumplen funciones como apretar el botón (o jalar el gatillo), hacer llamadas, chuzar teléfonos, hacer denuncias, trasladar personas secuestradas (para que otros las desaparezcan), reclutar candidatos a “falsos positivos”, etc. Tareas de por sí limpias, que no salpican de sangre, en las cuales el individuo puede disociarse moralmente del resultado de sus acciones. “Yo no maté a nadie, no soy un asesino, seguí órdenes”. El terror es una industria tecnificada, moderna, prueba de la eficacia en la organización capitalista del trabajo en Colombia.

Aunque la mayoría de los individuos que viven de manufacturar el terror no tengan inclinaciones sicóticas, o las terminan desarrollando en el camino, o terminan con una disociación muy fuerte entre el ser y el hacer. Los paramilitares, cada cual con cientos de asesinatos de personas inermes a cuestas, afirmaban patéticamente en sus declaraciones que ellos, en realidad, “no eran monstruos”… que eran padres responsables, maridos amorosos, etc. Alienación pura y dura. Sin embargo, no deja de llamar la atención la capacidad que el Estado tiene para garantizarse los servicios y la lealtad de individuos francamente enfermos para animar la realización de tareas de corte terrorista. En realidad, los individuos con motivaciones sicóticas no serán todos, pero son el motor que mantiene a la maquinaria andando. No basta la inercia de los empleados obedientes, se requiere individuos fanáticos, entusiastas, en la industria del terror para activar la motosierra y picar al fiambre a machetazos. La estructura del Estado, así como sus múltiples tentáculos paralelos (el Estado profundo), es un caldo de cultivo para esta clase de personajes siniestros. En el terrorismo de Estado se juntan el hambre con las ganas de comer: la insensibilidad burocrática con la crueldad patológica[1].

El hacker Andrés Sepúlveda, empleado de la campaña de Zuluaga y socio del ejército, a quienes entregaba las interceptaciones del proceso de negociaciones en La Habana para que fueran utilizadas como parte de la propaganda negra de los guerreristas, es la mejor prueba de lo que decimos. Este “héroe” -como se describe el mismo, haciéndose eco de esa consigna que “los héroes sí existen”-, con simpatías por el nazi-fascismo y su expresión criolla, el uribismo, repite el mantra de la derecha de ultratumba que reclama que la lucha militar contra las FARC-EP también debe golpear a sus “cómplices que actúan en el campo y en las ciudades sin uniforme”[2]. Así han justificado el genocidio de la UP, de A Luchar, del Frente Popular y el holocausto paramilitar que ha consumido una generación completa de colombianos y desplazado a más de seis millones de campesinos. Las inclinaciones perversas de Sepúlveda tienen un sustento ideológico en esa amalgama de ideas fascistas, conservadoras y neoliberales que tienen su principal adalid en la figura de Uribe Vélez.

lunes, 12 de mayo de 2014

ENTREVISTA. El brasil que recibe la copa del mundo

¿Qué Brasil recibe la Copa del Mundo en términos sociales, económicos y políticos?


El Brasil que recibe el Mundial, desde el punto de vista de los sectores populares, es un Brasil que viene de décadas de políticas sociales que han intentado paliar la situación de pobreza. Brasil era un país de pobres, hoy es un país con un poco menos de pobres, pero el modelo neoliberal brasileño sigue en pie, de tal modo que una parte de esas personas no tienen otro modo digno de sobrevivir que no sea a través de trabajos precarios.
A partir de junio del año pasado, hace ya casi un año, el grueso de la juventud brasileña dijo su propio basta en plena Copa Confederaciones, en rechazo primero al aumento brutal de los precios. Tenemos que hacernos a la idea que por ejemplo el transporte, un sólo recorrido, vale mas de un dólar, o sea vale unos quince pesos mexicanos.
Estamos hablando de formas de vida a nivel de salud y de educación con servicios muy precarios, y un transporte que demanda horas y horas para ir de un lugar a otro en las grandes ciudades,  muy caro y muy incómodo.
Primero las movilizaciones se dieron contra el aumento del transporte, luego contra la represión, porque en Brasil hay una policía militarizada que viene de otra época. Se crea con la abolición de la esclavitud, hace más de un siglo, justo para contener a los pobres y es una policía brutal.
La gente empieza a decir basta, se producen manifestaciones durante todo el mes en 353 ciudades de Brasil, contra la política económica, contra el Mundial, porque el Mundial implica el desalojo, el despejo de más de 200 mil personas para hacer aeropuertos, carreteras, y esto es lo importante y lo nuevo. A partir de cierto momento empiezan a salir los de más abajo, los de las favelas, los favelados, los más jóvenes, pobres, negros…
Estos sectores empezaron a movilizarse desde junio del año pasado. Siguieron las ocupaciones masivas de lugares públicos como los malls, llamándose rolezihnos, (rolé es una forma de salir y divertirse) y ocuparon masivamente varios shoppings de lujo teniendo como respuesta cuna represión muy fuerte. Ahora, en el último mes, están comenzando las movilizaciones en las favelas.
La salida de los favelados es algo que no se puede ocultar, sucedió en Sao Paolo, sucedió en Rio de Janeiro. ¿Y por qué digo esto? Porque hay que tener en cuenta que hasta ahora los favelados no se movilizaban debido a que sabían que si a las clases medias que se manifiestan las reprimen con balas de goma, a ellos los reprimen con balas de plomo.
El conocimiento de cómo es la represión había provocado durante mucho tiempo una retracción en la movilización, pero ahora ya están perdiendo el miedo. ¡Y cuidado! porque cuando los favelados en Brasil, tan sólo en Río, son 2 millones 700, de 12 millones de habitantes que tiene la ciudad, es un porcentaje importante de gente que está diciendo basta también. Todo esto está llamado a modificar radicalmente la situación política en Brasil.
No se si será en este Mundial, pero estamos ya en ese proceso de que los pobres pobres, ya no se dejan.


domingo, 11 de mayo de 2014

Ejército nazi/capitalista de Ucrania dispara y asesina a plena luz del día a civiles desarmados e indefensos

Está pasando, no lo estás viendo. El ejército de Ucrania,al servicio del gobierno golpista, y compuesto en buena parte por nazis reclutados para tales efectos, disparando fuego real -y asesinando- a civiles desarmados e indefensos.
Está pasando, no lo estás viendo. El ejército de Ucrania,al servicio del gobierno golpista, y compuesto en buena parte por nazis reclutados para tales efectos, disparando fuego real -y asesinando- a civiles desarmados e indefensos.
Asesinan y queman gente como en Odessa, los ahorcan como en las imágenes de vídeo que publicamos ayer, y ahora también los asesinan en la calle y a plena luz del día directamente desde las tropas enviadas por el estado en manos de "europeistas" y "nazis".
Sí, esto y cosas mucho peores (véase todo lo relacionado con la matanza de Odessa) es lo que tus medios de referencia te obligaron a defender en Ucrania como "demócratas" y "luchadores por la libertad".
Esta barbarie, que si estuviera siendo realizada por cualquier país "enemigo" horrorizaría al mundo entero, llenaría horas y horas de telediarios, y poco menos que se estaría rogando la invasión por la fuerza del país, es lo que la bestia nazi-capitalista está llevando a cabo en Ucrania con el silencio y la complicidad de los de siempre: medios, políticos capitalistas, las grandes potencias occidentales, etc, etc.
Esto tiene que pararlo alguien y tiene que pararlo ya. Antes de que estas imágenes o la matanza de Odessa sean el pan de cada día en ese país del este europeo.
Al fascismo hay que aplastarlo antes de que crezca, se reproduzca y lleve a toda Europa al HORROR Y EL TERROR.
Las imágenes son de hoy mismo en la ciudad de Mariupol, al este del país, en la república popular de Donetsk. Y diversas fuentes informan ya de más de una decena de muertos. La barbarie fascista se ha desatado en Ucrania y no tiene pinta de detenerse a corto plazo. EEUU y la UE no es que estén mirando para otro lado, es que son los que han dado cobertura y financiación, y, en momentos concretos, órdenes, a estos asesinos.

martes, 6 de mayo de 2014

6 DE MAYO.NICO VIVE. LA LUCHA SIGUE


Nicolás Neira fue un joven anarquista asesinado brutalmente por el escuadrón móvil antidisturbios ESMAD de la policía nacional durante la manifestación del primero de mayo del año 2005 en la cuidad de Bogotá, Nicolás  fue golpeado brutalmente en la cabeza, los golpes le ocasionaron lesiones severas causándole la muerte 5 días después. Nico es una de tantas víctimas de la violencia estatal, que desde la conformación de este cuerpo represivo (ESMAD) en el 2002, ha cobrado la vida de más de 50 personas y un sin número de atropellos y maltratos físicos a personas y comunidades que se han manifestado ante leyes injustas o que simplemente han protestado por alguna inconformidad frente  actos que atentan contra la vida, el territorio, la dignidad y la integridad colectiva. 



domingo, 4 de mayo de 2014

Autogestión y autoorganización, las verdaderas claves

“El espíritu insurreccional que hay en el anarquismo es hoy la única resistencia que se opone al utilitarismo reformista invasivo. Lejos de repudiarlo, precisamente por eso, lo consideramos la mejor fuente de nuestras energías” (Lettere ad un socialista, Luigi Fabbri, 1914). 
Encuentro interesante esta cita de Fabbri, bien clara por su lejanía de cualquier exceso extremista, por una reflexión sobre el tema de la violencia, que considero particularmente oportuna en un periodo de crecientes contradicciones sociales y de potencialidad revolucionaria (no necesariamente libertaria) como el que estamos viviendo, en el que el binomio insurrección y violencia es visto por algunos como imprescindible, como si todo acto violento fuera por sí mismo insurreccional, y por otros como inaceptable sin más.

El poder juega siempre
Refiriéndome a la definición de violencia, he afirmado muchas veces que el sujeto que es por excelencia su elemento constitutivo -es decir, la coacción física y moral- es el Estado, que con la amenaza de las leyes, dispositivos, normas, cárceles, manicomios, etc. integra a los individuos en un sistema de jerarquías y de valores autoritarios y de propiedad, de manera que no se discuta la presunta legitimidad del poder y de la propiedad privada.
De igual manera, la violencia puede ser entendida -y esta es la interpretación de la mayoría- como la afirmación de una voluntad criminal que se manifiesta en el uso de la fuerza física y de las armas.
Se interprete como sea, lo cierto es que la violencia se presenta como una relación social ya que implica dos sujetos, el que la ejerce y el que la sufre. Y como en cualquier relación social, plantea un problema político por implicar su uso un juicio ético sobre lo que es justo y lo que no lo es.
A tal fin es oportuno subrayar que la palabra “violencia” es básicamente utilizada por el poder para denigrar a sus opositores, ya sean reales o no; mientras, paradójicamente es el poder, el Estado, el que, arrogándose el monopolio de las armas y ejerciendo el gobierno sobre la sociedad a través de normativas y leyes, fruto exclusivo de las relaciones de fuerza existentes, ejerce coacción y obliga, “violencia” de hecho, aunque enmascarada por los mecanismos de la autodenominada democracia representativa.


viernes, 2 de mayo de 2014

"De nuevo la rebelión de las ruanas, ponchos y bastones"

El país aún recuerda a miles de campesinos y campesinas que en el 2013 salieron a las carreteras colombianas a exigirle al gobierno solución a sus críticos problemas. Esos mismos miles de campesinos y campesinas retornan a las carreteras denunciando el incumplimiento de los acuerdos pactados el año pasado y proponiendo refundar la política agropecuaria del país.

El paro agrario que se extendió por más de 40 días en el país es, sin lugar a dudas, uno de los acontecimientos más destacados del 2013. Su contundencia y capacidad de despliegue político, social, organizativo y de opinión provocó, por parte del gobierno nacional, respuestas insatisfactorias a las demandas del movimiento, así como un elevado respaldo ciudadano que logró develar la endémica política agropecuaria y, por consiguiente, permitió conocer la realidad de la pobreza rural como consecuencia de un modelo agropecuario insuficiente y favorecedor de los grandes empresarios del campo.
Nuevamente, los protagonistas del paro del 2013 se reafirman en sus exigencias y consolidan, junto a otros sectores del mundo rural, un nuevo ejercicio de coordinación y unidad a través de la Cumbre agraria, étnica y popular; proceso que viene articulando propuestas e iniciativas para refundar la política agraria en Colombia. Estos procesos han manifestado la inevitabilidad del llamamiento a un nuevo paro agrario para este mes de mayo, eso sí, bajo nuevas condiciones: la consolidación de un pliego único que consigna las peticiones de todos los sectores movilizados, para el caso de la Cumbre, y un pliego de 5 puntos de las Dignidades.
Las breves reflexiones que expongo a continuación proponen explicar el alcance de un nuevo ejercicio de movilización que podría malograrle la reelección a Santos, así como fortalecer los lazos de unidad entre sectores populares, cuyo horizonte debería ser la consolidación de un nuevo proyecto de nación.
La crisis del campo colombiano
Uno de los efectos destacables del paro agrario fue hacer evidente ante el país la existencia de una inobjetable crisis del sector agropecuario, tema que hasta antes del paro había estado reservado para algunos académicos e intelectuales interesados en el tema. Después de los acontecimientos la ciudadanía reconoce que en el campo colombiano las cosas van muy mal.
La crisis es de tales proporciones que en la actualidad el 77% de la tierra está en manos de sólo el 13% de los propietarios. Las cifras son igualmente dramáticas en materia de tierras despojadas: 6.6 millones de hectáreas fueron usurpadas violentamente a sus propietarios o poseedores, familias campesinas dedicadas a la agricultura. Esas mismas tierras hoy en su mayoría están dedicadas al cultivo de biocombustibles, a la ganadería extensiva o comprometidas en proyectos mineros.


jueves, 1 de mayo de 2014

Por el capital explotados. Por el estado despojados.

En nuestra memoria siguen vivas las luchas del proletariado y de los mártires de chicago. Aunque los tiempos son otros y, las relaciones de producción han cambiado, el enemigo sigue siendo el mismo. Hoy primero de mayo de 2014 seguimos luchando contra la voracidad capitalista y contra el estado. Actualmente pareciera que las luchas laborales solo quedan en consignas y, a pesar de ello, seguimos tercos en las calles peleando por rescatar nuestras vidas.