Por: Centro de Investigación Libertaria y Educación Popular -
CILEP
Los voceros de las Farc en La Habana y algunos sectores
sociales han planteado la necesidad de refrendar los posibles acuerdos de paz
mediante una asamblea constituyente. Aunque existen razones que justifican esa
posibilidad, hay argumentos políticos de peso para rechazarla:
no es el momento político propicio y no existe un sujeto
político capaz de tornarse poder constituyente y hegemonizar ese hipotético
espacio.
Existen razones que justifican la necesidad de una constituyente. Primero,
haría posible que el pueblo tome la palabra y que los posibles acuerdos entre
gobierno y guerrilla no se reduzcan a las élites que negocian en La Habana,
como ha sucedido con distintos acuerdos de paz y amnistías a lo largo de
nuestra historia republicana. En segundo lugar, y como consecuencia de lo
anterior, podría permitir un verdadero contrato social entre las colombianas y
colombianos o, cuando menos, un acuerdo más amplio que el que produjo la
Constitución de 1991. Tercero, ese contrato social proveería la legitimidad política
y la seguridad jurídica necesaria para que en Colombia se pueda hacer política
sin recurrir a la violencia, para que la diferencia se pueda expresar en un
marco de respeto. Finalmente, y sin ánimo de ser exhaustivos en estas razones,
podría posibilitar un avance en términos de derechos económicos, sociales y
culturales, incluso superando los alcances de la Carta del 91, ya bastante
mermados.
SEGUIR LEYENDO: http://kaosenlared.net/america-latina/item/51044-colombia-pros-y-contras-de-una-asamblea-constituyente.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario